lunes, 21 de febrero de 2011

PLAZA DE LA CATEDRAL












en el 3 de Julio de 1716 acordó el cabildo eclesiástico para la edificación de un templo Catedralicio, poco a poco se reunieron las fincas para poder tener un terreno bastante adecuado. En 1722 comenzaron los trabajos, ocupando el perímetro del templo una parte del barrio de las Escuelas, las obras empezaron y los muros de contención fueron la primera pieza de esta, la fachada quedaba delante de una calleja de menos de tres metros ancho. Al consagrarse el templo de 1838, se despejó algo de su frente derribando las casas comprendidas entre las calle de San Juan y Marrufo, resultando una mezquina plaza. Las primeras fincas derribadas en 1839 costaron 34.000 reales. Así las cosas, la real orden de 8 de Julio de 1862 declarando la utilidad publica la ensanche y otra de 2 de Agosto en la que se pedía la ampliación de los planos, facilitaron la realización de la deseada y necesaria reforma. La primera casa demolida fue la que formaba isleta por su situación entre las plazas de la Catedral y la de Silos Moreno y las calles de la Catedral y Marrufo, la cual afeaba aquel sitio y hasta impedía el paso de carruajes a la Basílica. Después, en 1867, se logró que la plaza de la Catedral quedase unida a la de Silos Moreno y de Santiago, colocándose una escalera y barandilla de hierro en el desnivel que resultó al unir la calle de Chantre con la expresada plaza de Silos Moreno, quedando estacionadas las obras de ensanche de la plaza hasta que el digno Alcalde D. Eduardo Genovés acometió en 1885 la empresa de dar cima a tan útil proyecto. Al efecto fueron derribadas las fincas que formaban la  prolongada y estrecha manzana de casas, que daban frente a la Catedral formando la angosta y desigual calle de la Virreina: se hizo desaparecer otra vez la casa que hacía martillo entre el arco de la Rosa y la calle de Chantre, quedando al fin libre el terreno y formando la extensa plaza que hoy admiramos.






     Al mismo tiempo se niveló aquel lugar, dando mayor anchura a la escalinata de la Catedral, trasladando al centro de la plaza la estatua de Silos Moreno por resultar casi inmediato al templo, construyéndosele nuevo pedestal con mayores proporciones que el primitivo. Esta plaza tuvo el nombre de Catedral desde su empiezo en 1838 pero aquí estos datos de las calles o plazas que estaban allí. Eran estas las de Silo Moreno y de Santiago y las calles Marrufo y la de Virreina. La plaza de Silos Moreno, fue dado este nombre en 1853 a la plaza de las Tablas que antiguamente se llamó de Cardoso. En 1671 se llamaba ya de las Tablas siendo su origen el que después del saqueo de los ingleses llegaron a Cádiz en 1596 muchas fuerzas militares ordenadas por el Rey en 1597 mandó se formasen casas de tablas y tejas para albergue de los soldados que estaban alojados en las pocas casas que quedaron para los vecinos de la ciudad, lo que hizo producir razones quejas.


     En el año 1612 se acordó dar tributo perpetuo o separadas, las casillas de tablas de la plaza de Cardoso y el 4 de Enero del siguiente año vuelve a tratarse de las seis casas de tablas. En actas municipales de 1674, aparece ya el nombre de plaza de las Tablas y en escritura publica del citado año de 1671.El nombre de Silos Moreno, recordado del humilde monje Benedictino que por sus virtudes fue elevado a la dignidad episcopal. Su historia está ligada a la Santa Iglesia catedral, cuyas obras suspendidas en 1796, gracias a las iniciativas de D. José Manso, gobernador militar y del venerable prelado, tomaron el empeño de su terminación que el 28 de Noviembre de 1838 se consagraba el templo Fray Domingo de Silos Moreno era natural de la Rioja, donde nació en Cañas, el 23 de Julio de 1770 y falleció en Cádiz el 9 de Marzo de 1853. Plaza de Santiago.- por la iglesia antes ermita de este Santo, tomó nombre esta plaza que también parte de ella tuvo el nombre de Marroquí o Marroquín. Marrufo, se le decía calle de los Marrufos por una familia antiquisima de Cádiz, uno de los individuos llamado Tomás, en 1845 fue racionero de la Catedral, y otros Regidores perpetuos, como Francisco Marrufo de Negrón. Virreina se conocía por plazuela y era calle de este nombre, se cita en 1687.


En la calle que pasa de la plazuela de las Tablas a la del Colegio de la Compañía de Jesús y va derecha a la del juego de la pelota, tomó el nombre de Virreina por la viuda de D. Gabriel Diez del Castillo, Virrey que fue de Chile. En 1855 tuvo el nombre de Cayón, por Torcuato Cayón, arquitecto de las obras de la Catedral, corrigiendo sus planos. Se le deben los mejores edificios de Cádiz como la Santa Cueva, el Rosario, el Hospicio, el Teatro principal, nació en 1725 y falleció en San Fernando en 1783. En 1783 fue cambiado el nombre de la calle por el de Armonía, en esta calle nació el ilustre sabio D. Eduardo Benot, el cabildo de 11 de Marzo de 1893 dispuso la correlativa numeración a la plaza de la Catedral.



Etiquetas:

CASTELAR (Actual Pza. Candelaria)








 curiosas son las alteraciones que ha sufrido el nombre de ésta hermosa plaza, tan favorecida por el publico. Serenados  los ánimos, no se conciben los diferentes y contrarios acuerdos adoptados con motivo del nombre que hoy ostenta, con legitimo orgullo de los gaditanos. Por primera vez, en 30 de  Septiembre de 1869,  sustituye el nombre de Castelar el de Candelaria en la que entonces era una pequeña plaza.


      El 12 de Febrero de 1873 se le dio el nombre de Castelar, luego había desaparecido el de Castelar. El 3 de Noviembre de 1873, se propone que la plaza resultante del derribo del convento lleve el mismo nombre que la pequeña que antes formaba aquello sea el de Candelaria, al mismo tiempo se proponía el arreglo de las calles afluentes de ella.


 La de Bilbao (de Cobos a la Plaza) se llamaría de Sagunto, y desde la plaza de Candelaria, de Bilbao la del torno de Candelaria (de Prim a la Plaza) Escuelas y desde la plaza a la calle de Abenda de Montañés. Proyecto que fue suspendido por el Cabildo siguiente, fecha 5, desistiéndose en definitiva en el 22, entre otras razones porque no sabía si la plaza era de domino publico. Al año siguiente el 18 de Febrero se le da el nombre de Emilio Castelar. En 1879 se propone poner una estatua de D Diego Fernández Montañés, pero es denegada dicha petición.




      Por ultimo el 2 de Marzo de 1883 la comisión de policía urbana al designar la calle Cruz de la Madera para llevar el nombre de D Antonio López, pide el de Castelar para la de Candelaria. La primitiva plaza era un pequeño espacio, que resultaba entre la fachada del convento y la alineación de las calles Santo Cristo y Montañés; tenía grandes y añosos arboles que la hacía muy sombría y asientos de piedra con respaldo de hierro. El convento fue fundado por el Obispo. D. García de Haro, el año 1567, estableciéndose con doce piadosas mujeres en la ermita de Ntra. Sra. de San Roque (hoy parroquia) trasladose en 1593 a la antigua ermita de los moriscos y protección del Obispo D. Antonio Zapata, que les donó los avales inmediatos para el albergue. El edificio se reedificó en 1680 a 1690, siendo el estado ruinoso en 1873, cuando en aquellos azarosos días se acordó su derribo, que con notables y enérgicas protestas del gobierno eclesiástico se empezó el 28 de marzo de dicho año. Terminado el derribo quedó mucho tiempo ocupado por los materiales suscribiendo discusiones sobre el destino que había de darse el mismo.


      Los vecinos de la plaza, con la intervención municipal, lo adquirieron en propiedad, con la condición de que no se edificase en él, destinándose al servicio publico por eso al concederse en sesión de 18 de Noviembre de 1881 a Don José María Quintero permiso para la colocación, en su centro de un circo ecuestre, protestaron con energía, a pesar de lo cual funcionó la compañía Rinarelli y aún se le concedió una prorroga, transformándose el circo en teatro, que inauguró una compañía de Zarzuela, el 25 de Marzo de 1882. hay que advertir que la plaza no estaba urbanizada, siendo una extensa planicie de escombros apisonados. Con anterioridad había solicitado el Sr. Rafael Rocafull, establecerse en su centro un pabellón de hierro y cristal dedicado a exposición permanente siéndole negada la autorización que para ello pedía. Los parterres y calles que constituyen el lindo paseo se formaron en 1884, si bien después hubo necesidad de modificarlos, dándole a las calles de arboles mayor anchura, reformándose por ultimo en 1903. El monumento al eximio Castelar que existe en su centro, se debe principalmente a iniciativas del Excmo. Sr. D. Luis José Gómez. Alcalde entonces de esta ciudad. La antigua plaza de la Candelaria se llamó de la Ermita de los Moriscos por estar situada, antes de la expulsión de estos, en 1610, en la calle Santo Cristo después de la fundación del Convento, tomó el de Candelaria. También en 1833 le fue variado el nombre por el de Avieno, poeta.


      La calle que a mas de la plaza, existía bajo el mismo nombre de la Candelaria. La formaba el lado este de la actual plaza, conservando el nombre en la reforma de 1855 y antes de la fundación del convento y en 1906 era conocida por de Villavicencio.


El templo y la puerta de este daban a la calle dicha, las otras dos calles que cerraban  el cuadrilátero eran, por el lado de Bilbao, estrecha y lóbrega por la anchura de los muros del convento, que sujetas por grandes llaves de hierro amenazaban caer, y por el oeste la del torno de Candelaria.


      En principio no eran más que una explanada, donde estuvo instalado un circo ecuestre y posteriormente un teatro de Zarzuela.


      En 1884 se urbanizó formándose los jardines y fue reformada en 1903. El monumento a Emilio Castelar se inauguró en una gran ceremonia, el 5 de Octubre de 1903.


En el acto pronunció unas palabras otro gaditano, Seguismundo Moret. Con anterioridad se había descubierto una lápida conmemorativa en la fachada de la casa nº 1 donde nació Castelar, cuya figura fue glosada por Rafael de la Viesca.


      Emilio Castelar nació en Cádiz, el 8 de Septiembre de 1832 y murió en San Pablo del Pinatar, en 1899. Gran orador, escritor y político, fue el ultimo presidente de la primera república. Su fama como orador, que aún hoy perdura, la ganó la primera vez que habló en publico. Ganó por oposición la cátedra de historia de España, siendo separado de ella por un articulo titulado El Rasgo, que publicó en el periódico La Democracia que él había fundado, tomó parte en la revolución de Junio de 1866, tras la cual tuvo que exilarse en Francia, volviendo a nuestro país en 1868, tras la Gloriosa.


      Tras la caída de la república abandonó la política para dedicarse a la literatura y la historia. Entre sus obras merece destacarse Recuerdos de Italia y la Historia de Europa en el siglo XIX.



Etiquetas:

CORRALÓN DE LOS CARROS


La calle Corralón de los Carros es una de las mas características de la Viña, se encuentra entre las calles Polier y José Cubiles.


      En 1796 la calle se conocía por de la Viña y también por del Husillo. A mediados del siglo XIX tomó el nombre de Corralón de los Carros, porque en ella existía uno donde se guardaban los carros la limpieza del vecindario, se le puso el nombre de Mariana Pineda, que desapareció tras la guerra civil. Mariana Pineda nació en Granada y murió en esta misma ciudad el 11 de mayo de 1831. Fue condenada a garrote vil por los tribunales de Fernando VII,  por haber sido sorprendida bordando una bandera de tafetán morado, con un triángulo verde en el centro y algunas letras en seda rojas que, con otras recortadas en papel, venía a formar los nombres de  Libertad Igualdad y Ley la bandera estaba destinadas a los liberales andaluces que trataban de restaurar el sistema constitucional.

Etiquetas:

CARDENAL ZAPATA










 La primera de estas empezaba en Montañés y finalizaba en la esquina de José del Toro, donde comenzaba Albenda. En principio se llamó Alonso de Hurtado de Águila, pasando a llamarse Torno de Candelaria porque a ella daba la puerta del torno del convento. Adolfo de Castro dice ignorar el origen del nombre de Albenda explicando el significado de esta palabra, que es una colgadura de lienzo blanco. Apunta con dudas, que podría tratarse de una corrupción del apellido de un regidor perpetuo llamado Alfonso González de Abelda. Según investigaciones realizadas por Smith Samariba, este es el origen del nombre, pues en esta calle tenía su casa solariega la familia González de Abelda, que fuesen regidores perpetuos a lo largo de ciento treinta años por juro de heredad. También existió en la ciudad otra rama de la familia Abelda, pues consta en el convento de Santa María que profesaron el mismo día, 8 de Marzo de 1721, tres hermanas llamadas Josefa, María e Ignacia Montes de Oca Abelda.


      El Cardenal Zapata y Cisnero fue Obispo de Cádiz en 1587, y hasta 1596, pasando después a la diócesis de Pamplona y a la metropolitana de Burgos, siendo promovido al cardenalato por el Papa Clemente VIII y asistiendo a dos cónclaves. Felipe III le nombró consejero de Estado y luego Virrey de Nápoles. Realizó numerosas obras en Cádiz destacando su aportación a la construcción de las murallas del frente de la bahía, edificó casas de piedras para alojamiento de soldados en Puerta de Tierra, dio a la comunidad de monjas de Candelaria la ermita de los moriscos y mejoró el citado convento.



Etiquetas:

CANOVAS DEL CASTILLO




 el 13 del mismo mes de la gloriosa muerte de los disparos de Angiolillo, en Santa Agueda, el 8 de Agosto de 1897, se le dio el nombre de Murguía.


La calle de Murguía empezaba en la plaza de la Constitución y terminaba en la plaza de Orta (ensanche irregular de la hoy Valverde).


                A mitad del siglo XVII se considera unida a la de la Carnicería del Rey, después se llamó de la Cruz de Juan de Otañez, también del Portón de Juan Vite y de Juan Vite solo. En 1670 se conocía vulgarmente como la calle del Gitano Rico y posteriormente Murguía. También se le denominó Heredia, por Diego Fernández de Heredia, defensor de los derechos y libertades de Aragón por lo cual fue decapitado. Este nombre, al parecer fue efímero. En 1931 se le llamó Hermenegildo Ginés de los Ríos que fue republicano destacado, miembro del partido radical  y diputado a Cortes por Barcelona y Velez-Málaga, publicista y catedrático de Filosofía y Retórica de varios institutos. Nació en Cádiz en 1847 y murió en Granada el 20 de  Agosto de 1923.


                Después de la guerra civil volvió a llamarse Canovas del Castillo, insigne estadista, jefe del partido Conservador, escritor y orador, fue el principal autor de la restauración de la Monarquía Borbónica. Ministro de Estado, Hacienda y Ultramar, decidió a Isabel II en París a que abdicara en favor de su hijo. Después de la proclamación de Alfonso XII en Sagunto asume el poder que alternó por seis veces con Sagasta, jefe del partido Liberal. Nació en Málaga, en 1828 y murió en el balneario de Santa Agueda, Guipúzcoa, asesinado por el anarquista italiano Miguel Angiolillo, cuando ocupaba la presidencia del gobierno. Era académico de la Lengua, Historia, Ciencias Morales y Políticas y Bellas Artes.



Etiquetas:

domingo, 13 de febrero de 2011

EL CALLEJÓN DE LOS NEGROS




El Callejón de los Negros.- es la pequeña vía que sale al muelle, haciendo esquina a la calle Lázaro Dou, desde Plocia. Antiguamente era una rampa que conducía al baluarte de los negros, que se encontraba a la altura de lo que hoy es Fabrica de Tabacos. Anteriormente a este baluarte existió otro llamado de las Cañas y en sus proximidades estuvo el baluarte del Boquerón o del Boquete, que fue destruido al edificarse la alhóndiga en el lugar que hoy ocupa la fabrica de tabacos. En la reforma de 1855 también varió de nombre, adoptando el de Toviño, tribuno de las milicias romanas, 193 años antes de Cristo. En la lapida de su tumba se considera la más antigua de las encontradas en Cádiz. Durante la segunda república se le puso el nombre de Alonso María de las Torres, que fue diputado doceañista y vicepresidente de las Cortes Constitucionales de 1810, siendo representante de  Cádiz. Tras la guerra civil volvió a llamarse Callejón de los Negros.


                Como queda dicho, hace esquina con la calle Lázaro Dou que fue hasta el derribo de las murallas un callejón muy sucio y estrecho, que se conocía como Muralla. En 1855 se le puso Ciscar por Gabriel de Ciscar, general de marina y Regente del Reino. En el centenario de las Cortes de Cádiz. El 23 de Agosto de 1912, y a petición de la ciudad de Barcelona recibió el nombre que ostenta. Ramón Lázaro Dou fue presidente de las Cortes de 1812, siendo diputado por Barcelona



Etiquetas:

CALLE DESAMPARADOS

se le decía Callejón de los Desamparados y formaba parte del callejón bajo de las Descalzas o Descalzas bajas. También, unidos ambos callejones, se le llamaron de Puerto Chico. El callejón bajo de las descalzas empezaba en Puerto Chico y terminaba en la plaza Eduardo Benot: siguiendo por el lado sur de la plaza de la libertad. El nombre de los Desamparados pudo ser por alguna imagen de esta advocación que en aquellos lugares se venera. En Cádiz existía una cofradía de los Desamparados que su templo lo tenía en la Iglesia Castrense, donde aun esta el Altar de la titular y algunos documentos de la misma.
                A esa cofradía pertenece la imagen de Ntro. Padre Jesús de los Desamparados, que recibe culto en San Antonio. De 1855 a 1856 se llamó el de Reyes por Doña Micaela de los Reyes, que nació en Cádiz, en 1856 y falleció en 1723. (Monja)





Etiquetas:

CALLE CHURRUCA


Churruca.- en 1865 se le dio este nombre a la calle de Amoladores que así la conocía el vulgo, por existir en ellas varios industriales dedicados al artificio de afilado de herramientas. En tiempo se conocía por el de Juan de Ochoa. En ella debió tener su casa morada, en 1664, el regidor D. Juan de Ochoa Suazo, o el canónigo D. Juan de Ochoa o bien ambos. El nombre de Churruca lo llevó por D Cosme Damian Churruca, heroico brigadier de la Armada, que murió en el famoso combate de Trafalgar.


                Nació el 27 de Septiembre de 1761 en Motrico (Guipúzcoa) estaba casado con Doña María de los Dolores Ruiz de Apodaca, apellido estimado en la ciudad.

Etiquetas: